Saludo del Director del Departamento de Trabajo Social, Dr. Helder Binimelis Espinoza, a quienes inician el proceso de práctica profesional 2018:
Estimadas y Estimados Estudiantes:
Cada año a fines de marzo se inicia un proceso fundamental en su formación profesional. Este año, 110 estudiantes de tercer, cuarto y quinto año efectuarán procesos de práctica profesional en 61 instituciones de las comunas de Carahue, Chol Chol, Collipulli, Lautaro, Nueva Imperial, Padre Las Casas, Pitrufquén, Pucón, Temuco, Traiguén, Victoria, Vilcún y Villarrica.
Más allá de estas cifras, es importante destacar la relevancia que tiene el proceso de práctica en el ámbito del trabajo social, ya que se constituye en una experiencia diferenciadora con otras carreras y disciplinas de las ciencias sociales. Para el trabajo social, la práctica es una experiencia de vinculación con experiencias de malestar social vivenciadas por personas, grupos, comunidades, y es también una posibilidad de contribuir a la transformación social. No es una actividad formativa más, sino una experiencia al mismo tiempo racional y afectiva que se constituye en el sello identitario profesional y disciplinar del trabajo social.
Pero para que eso ocurra, para que las prácticas profesionales efectivamente se vivan como experiencias que definan sus identidades profesionales, ustedes están llamados a asumirlas con fuertes convicciones éticas y políticas, y con una actitud reflexiva y critica sobre sus propias experiencias de vida, sobre la sociedad en la que nos toca vivir, y sobre los aprendizajes adquiridos en estos años en la universidad. Esta búsqueda de ética, política y reflexividad no debe entenderse como una necesidad exclusiva de los estudiantes, sino que es algo que nos desafía a todos, y especialmente a nosotros que acompañamos sus procesos de formación.
Estamos obligados a ser autocríticos con el activismo, con el el hacer por el hacer. Ya que no se trata únicamente de una serie de actividades y tareas que se deben cumplir porque estamos en práctica. Se trata de asumir esas experiencias desde determinadas convicciones que ustedes han debido ir madurando en estos años, y otras convicciones más que se deberán ir consolidando a partir de estas nuevas experiencias.
En el contexto de la sociedad chilena actual no podemos pensar y desarrollar una práctica profesional sin estar conscientes de las diversas formas de intolerancia, de la manipulación de la verdad, de la reducción de la vida social al consumo o al emprendimiento económico como única vía legítima para la solución de diversas necesidades sociales. No podemos optar por la cómoda posibilidad de que ya no existen alternativas.
La apatías e insatisfacciones de unos, y las convicciones de otros nos han llevado a una situación de profundo cambio político en nuestro país, el que, inevitablemente tendrá consecuencias sociales y políticas de las que nos iremos enterando en los próximos meses. Muchas de sus experiencias de práctica, directa o indirectamente se verán afectadas por las decisiones que tome el actual gobierno en el ámbito de las políticas sociales. En este contexto el desafío de una ética, de un compromiso político y de una actitud reflexiva respecto a las consecuencias de los cambios sociales y políticos en curso, debe ser una preocupación constante, en relación a los objetivos de esos cambios y al tipo de sociedad que están promoviendo.
El compromiso en los procesos de práctica no es solo con las instituciones y con los supervisores. Es por sobre todo con las personas, grupos y comunidades con quienes ustedes directa o indirectamente van a trabajar. Ser reflexivos y críticos en su práctica profesional implica hacer un esfuerzo por tener eso siempre presente, por orientarse de la mejor forma posible para contribuir con los procesos de transformación social en beneficio de quienes más lo necesitan.
Es también una posibilidad de que las voces de esas personas, grupos y comunidades no queden en el olvido y la marginación. Las experiencias de práctica deben ser también experiencias de construcción de conocimiento, de sistematización de experiencias para dar a conocer aquello que ha sido silenciado, aquello que parece que no existe, aquello que es negado en su existencia o convertido en voz marginal o conflictiva.
Estimadas y estimados estudiantes, les invito a que vivan sus prácticas profesionales como procesos de formación integral, en las que van a crecer en experiencias, en conocimientos y en nuevas emociones.
Quisiera agradecer finalmente a todos los académicos y administrativos que han contribuido con su enorme esfuerzo a organizar esta actividad. No solo la ceremonia, sino el proceso entero de asignar prácticas profesionales a 110 estudiantes en 61 instituciones diferentes. Un proceso que ha implicado un enorme esfuerzo de gestión y coordinación. Quisiera destacar especialmente el trabajo del Coordinador de Prácticas, el académico Dennis Smythe y de la Jefa de Carrera Fabiola Hernando, y de nuestra asistente de carrera Mery Ochsenius.
También agradecer a los estudiantes de la carrera que han contribuido con su esfuerzo a la organización de esta ceremonia, a los ayudantes de los docentes encargados de práctica y a los estudiantes de cuarto año por este sentido homenaje a Banis.
Gracias a todos ellos, y mucho ánimo y éxito en sus experiencias de práctica.